Me tomo la Palabra

En nuestro recorrido de huertas, pasamos por el barrio Tisquesusa, ubicado en medio de los barrios La Española, Afidro y Palestina, no muy lejos del Centro de Transformación Social. Allí está localizada la huerta Fuente de Vida, un proyecto fascinante que atrae la atención del Centro por su enfoque comunitario y su impacto positivo en la zona. Esta huerta es mucho más que un espacio agrícola; es un símbolo de esperanza y unión entre vecinos.

 

Desarrollada con el propósito de promover la seguridad alimentaria y fortalecer los lazos entre los residentes, la huerta Fuente de Vida es un oasis verde en medio de la ciudad. Fue concebida a través de un esfuerzo colaborativo entre los habitantes del barrio, quienes transformaron un terreno baldío en un jardín productivo. Además del apoyo del Centro de Transformación Social, diversas organizaciones locales y voluntarios han contribuido con donaciones de semillas, herramientas y conocimientos técnicos para hacer realidad este proyecto.

 

Ubicada estratégicamente en el Parque del Barrio Tisquesusa, la huerta Fuente de Vida está abierta para que todos puedan visitarla y aprender sobre cultivos orgánicos, prácticas sostenibles y técnicas de jardinería. Además, ofrece asesoramiento a aquellos que deseen iniciar sus propias huertas en casa. Es un espacio acogedor donde la comunidad se reúne, comparte conocimientos y brinda apoyo mutuo.

 

En caso de necesitar orientación sobre cultivos, información sobre agricultura urbana o simplemente disfrutar de la serenidad que ofrece la naturaleza en medio de la ciudad, la huerta Fuente de Vida es un lugar al que se puede acudir. Su mensaje trasciende las fronteras físicas del barrio, invitando a todos a unirse y promover un cambio positivo a través del cultivo y el cuidado del entorno.